domingo, 10 de mayo de 2009


Que mierda que otros nos roben el corazon, verdad?
Normalmente este tipo de hurtos, suele ser con nuestro beneplacito.. pero en que condiciones nos lo devuelven, por dios...
tu venga a protegerlo, a dejarle crecer, a darle los mejores alimentos, a acariciarlo en tus horas muertas, a darle una vida saludable, sin alteraciones
y llega alguien
y te pide hueco, y le dejas pasar, desconfiado.. y de repente se convierte en su mascota... o algo así
le trae a el las zapatillas, duerme a su lado de la cama...y tu los miras, y no puedes evitar orgullo de verlos llevarse tan bien
cuando quiere pasear, a el le lleva la correa, cuando busca caricia, es su mano la que espera... jodido corazon mal amaestrado
elige el, no tu
cuando vuelve a ti, con rasguños, sucio y callejeado.. si vuelve, claro.. te das cuenta de la tarea que te dejaron por delante
recuperar su aspecto anterior te costara... pero
como a tu corazon le haya gustado la calle, estas perdido
siempre
siempre buscara esa puerta abierta... para encontrar nuevo dueño. Hay corazones que son así de listos.
Y no te preocupen sus cicatrices... quiza lo mimaste demasiado, y no era eso lo que el buscaba. Quiza...

2 comentarios:

  1. Es un típico caso de complicidad manifiesta por parte de la víctima. Se siente. ;)

    Pero qué bien lo cuentas, jodía...

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  2. Visito por primera vez tu espacio y he quedado enganchada a tus palabras. cuidado con ese corazón callejero. precioso.
    Un saludo.

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